Gestión de todos los recursos de tal forma que se satisfagan todas las necesidades económicas, sociales y estéticas al tiempo que se respeta la integridad cultural, los procesos ecológicos esenciales, la diversidad biológica y los sistemas de apoyo a la vida.

¿Qué es el ecoturismo?

Aunque no se cuenta con una definición universal del ecoturismo, sus características generales pueden resumirse así:

Toda forma de turismo basada en la naturaleza, en la que la motivación principal de los turistas sea la observación y apreciación de esa naturaleza o de las culturas tradicionales dominantes en las zonas naturales.

Incluye elementos educacionales y de interpretación.

Generalmente, si bien no exclusivamente, está organizado para pequeños grupos por empresas especializadas, pequeñas y de propiedad local. Operadores extranjeros de diversa envergadura también organizan, gestionan y comercializan giras ecoturísticas, por lo general para grupos reducidos.

Procura reducir todo lo posible los impactos negativos sobre el entorno natural y socio-cultural.

Contribuye a la protección de las zonas naturales:

  • generando beneficios económicos para las comunidades organizaciones y administraciones anfitrionas que gestionan zonas naturales con objetivos conservacionistas,
  • ofreciendo oportunidades alternativas de empleo y renta a las comunidades locales,
  • incrementando la concienciación sobre conservación de los activos naturales y culturales, tanto en los habitantes de la zona como en los turistas.

Se ha comprobado que todavía no se ha prestado la debida atención a ciertos aspectos del ecoturismo, tales como:

  • tenencia de la tierra y control del proceso de desarrollo del ecoturismo por parte de las comunidades locales,
  • eficiencia y adecuación del concepto actual de zonas protegidas por razón de su diversidad biológica o cultural,
  • necesidad de mayores precauciones y vigilancia en las actuaciones en zonas especialmente vulnerables,
  • derechos indígenas y tradicionales en zonas aptas para el desarrollo del ecoturismo.

Los principios del turismo sostenible fueron definidos por la Organización Mundial del Turismo en 1988. Se concibe así esta modalidad turística como la conducente a la gestión de todos los recursos de tal forma que se satisfagan todas las necesidades económicas, sociales y estéticas al tiempo que se respeta la integridad cultural, los procesos ecológicos esenciales, la diversidad biológica y los sistemas de apoyo a la vida.

Debe distinguirse claramente entre ecoturismo y desarrollo sostenible: el concepto de ecoturismo se refiere a un segmento dentro del sector turístico, en tanto que los principios de sostenibilidad deben aplicarse a toda forma de actividad, gestión, empresa y proyecto de turismo, tanto convencional como alternativa.

Sistemas de certificación de sostenibilidad en turismo

La necesidad de una mayor sostenibilidad en los servicios y actividades turísticas ya es ampliamente aceptada en todos los niveles. Asimismo, existen numerosas y variadas metodologías de planificación y desarrollo, así como técnicas de gestión del turismo que permiten alcanzar mayores niveles de sostenibilidad e incrementarlos gradualmente. Un instrumento complementario a tales metodologías y técnicas lo constituyen los sistemas de certificación voluntaria de los servicios turísticos y de las empresas que los prestan, los cuales han aparecido en el mercado turístico internacional a partir de 1990 y se han multiplicado en los últimos años.

Las certificaciones y eco-etiquetas sirven básicamente tres propósitos, a saber:

  • 1) Estimular a los prestadores de servicios turísticos a introducir mejoras en sus operaciones, tendientes hacia una mayor sostenibilidad ambiental, económica y social, facilitando incentivos y asistencia técnica para lograrlo.
  • 2) Diferenciar o distinguir aquellos productos o servicios turísticos que satisfacen requerimientos medio-ambientales, sociales y económicos más allá de lo exigido por la legislación vigente.
  • 3) Orientar a los consumidores sobre las características de sostenibilidad de los servicios turísticos disponibles en el mercado.

Adicionalmente, las certificaciones y eco-etiquetas cumplen una función de promoción y estímulo de niveles más altos de sostenibilidad y calidad en todo el sector turístico, así como de mejora de imagen de las empresas certificadas, con los consiguientes beneficios de comercialización que ello representa.

A pesar de su proliferación reciente, y en parte a raíz de ella, los sistemas de certificación no han logrado implantarse en forma significativa ni entre las empresas del sector en las Américas ni entre los consumidores turistas. Tampoco existe unanimidad u homogeneidad entre los diversos sistemas existentes, lo que redunda en una confusión entre los usuarios.

Como resultado de su intervención en los diversos foros de las Naciones Unidas relativos a la sostenibilidad, la Organización Mundial del Turismo comenzó un análisis de la efectividad de certificaciones y eco etiquetas relativas a las distintas ramas de actividad turística en 1999. Una publicación conteniendo los resultados de tal análisis fue publicada por la OMT en 2002, y su Comité de Desarrollo Sostenible del Turismo analizó tales resultados en su Tercera reunión, celebrada en Costa Rica en septiembre de 2002. Asimismo, pidió a la Secretaría General de la OMT la preparación de unas recomendaciones para orientar a los gobiernos en materia de certificación, ya sea para establecer tales sistemas, o para seleccionar de entre los existentes, o para apoyar una más amplia utilización de los mismos. Dichas recomendaciones fueron transmitidas a los Estados Miembros en mayo del presente año.

La Conferencia Regional de las Américas sobre Certificación de Sostenibilidad de las Actividades Turísticas (Bahía, Brasil – 29 y 30 de setiembre de 2003)fue convocada por la Organización Mundial del Turismo, a invitación del Gobierno de Brasil, y co-organizada conjuntamente con la Alianza para Bosques (Rainforest Alliance), la Sociedad Internacional de Ecotourismo (The Internacional Ecotourism Society), y el Instituto de Hospitalidade de Brasil. Además, la Conferencia contó con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo y de la Fundación Ford. Realizó una serie de recomendaciones:

RECOMENDACIONES

A Gobiernos

Tanto los estudios de casos de procesos de certificación como las discusiones durante la conferencia demostraron el papel fundamental de los gobiernos. Las sugerencias y comentarios de los participantes reforzaron también las recomendaciones formuladas por la OMT a los gobiernos con el objeto de establecer o apoyar sistemas de certificación turística.

Los gobiernos deberían tomar en consideración los siguientes puntos:

  • Incluir la certificación en las políticas y estrategias nacionales y locales de desarrollo turístico, como una herramienta para fomentar la sostenibilidad de operaciones turísticas.
  • Apoyar financieramente a los sistemas de certificación, especialmente en la fase inicial, para lograr una masa crítica de empresas certificadas. Buscar financiamiento de organizaciones internacionales y ONGs, y actuar como mediador para garantizar el financiamiento de fuentes multilaterales a los procesos de certificación.
  • Participar en la creación de la Red de Certificación en Turismo Sostenible de las Américas, y facilitar el intercambio de experiencias.
  • Coordinar a los diferentes grupos de actores, y facilitar la creación de un ente multi-actores a nivel nacional, que funcione como promotora de los sistemas de certificación. La colaboración es importante desde el principio del proceso, estableciendo el marco institucional, los criterios y procedimientos de certificación conjuntamente.

Los gobiernos podrían orientar sus actividades de coordinación hacia los siguientes grupos:

Otras administraciones y organismos nacionales:

Las Administraciones Nacionales de Turismo deberían coordinar en primer lugar con administraciones y organismos nacionales con competencias en otros sectores relacionados (por ejemplo, medio ambiente, patrimonio histórico y natural, normalización y acreditación nacionales reconocidos internacionalmente).

Sector privado:

Los gobiernos pueden emprender las siguientes acciones para hacer la certificación atractiva y factible para las empresas, estimulándolas a participar:

  • Divulgar información sobre los beneficios e implicaciones de la certificación al sector privado, facilitar sus acciones y otorgarles liderazgo.
  • Otorgar un subsidio público inicial para crear una masa crítica de empresas certificadas (es una condición fundamental para la aceptación y viabilidad de programas de certificación).
  • Apoyar a las empresas comprometidas y certificadas por medio de ventajas e fiscales (e.g. reducción/excepción de impuestos, préstamos de interés preferencial, garantía estatal para préstamos bancarios). Crear incentivos fiscales especiales para las pequeñas y medianas empresas.
  • Dar ventajas de mercadeo a las empresas que cumplen ciertas normativas de sostenibilidad. Incluir a sistemas de certificación, a las empresas y a sus productos cerificados en los planes promocionales del país, distinguiendo empresas certificadas en las acciones de mercadeo.
  • Facilitar asistencia técnica a las empresas comprometidas con el fin de prepararlas para cumplir con los criterios de certificación.
  • Considerando la amplia informalidad del sector turístico privado en las Américas, crear normas de formalización accesibles, especialmente considerando la realidad de las empresas pequeñas y medianas. La legalización de los emprendimientos turísticos es la base de su participación en programas de certificación.
  • Considerar la posibilidad de que el gobierno utilice servicios turísticos certificados, e incluya el uso de productos certificados en procedimientos de compra pública.

Autoridades y comunidades locales:

Promover la certificación de destinos y estimular que las autoridades locales participen en la certificación de destinos turísticos bajo su jurisdicción.

Participar en el desarrollo de los criterios de certificación tomando en cuenta la variación de las condiciones y necesidades de las diferentes regiones y localidades dentro del país.

Instituciones académicas y de investigación:

Fomentar la investigación de los impactos de las actividades de turismo y de los sistemas de certificación, y apoyar a las instituciones de investigación con este propósito.

Consumidores:

Incentivar la concientización de la población en general (por parte del gobierno nacional/estatal/municipal), para fomentar la discusión de los impactos ambientales/socioculturales del turismo y estimular la necesidad de marcos reguladores para el turismo sostenible.

Mercadear la certificación entre los consumidores para fomentar el uso de productos turísticos certificados y crear más demanda para ellos.

A organismos de financiación:

Los organismos de financiamiento deberían tomar en consideración los siguientes puntos para el financiamiento de los programas de certificación:

  • (i) proporcionar subsidios para crear masa crítica de empresas certificadas que den el ejemplo al resto del sector;
  • (ii) fijar políticas de precios de servicios turísticos sostenibles, o establecer una tasa al turista que cubra parte de los costos de certificación;
  • (iii) promover la inclusión de incentivos fiscales como forma de promover la inversión en certificación;
  • (iv) desarrollar y presentar una estrategia de marketing de los sellos nacionales/internacionales que contemple el mercadeo de los productos certificados;
  • (v) crear campañas de información al consumidor para concienciarlos a que utilicen servicios y productos certificados;
  • (vi) incluir indicadores de sostenibilidad en los proyectos financiados por la banca multilateral que puedan monitorear y evaluar desempeño de las empresas participantes;
  • (vii) vincular, a través de las legislaciones nacionales, al turismo como un componente ambiental importante, de forma captar el interés del financiamiento internacional de proyectos turísticos ambientalmente amigables.

Las empresas turísticas privadas y sus asociaciones comerciales podrían:

  • (i) acceder a instrumentos de cofinanciamiento de cooperación técnica canalizada a través de los gobiernos y manejados por ejecutores privados ágiles y accesibles, que respondan en tiempos aceptables para el sector privado;
  • (ii) informar a colegas o afiliados a la asociación respecto a las alternativas de financiamiento;
  • (iii) apoyar la conformación de «clusters», alianzas/grupos, buscando un financiamiento más ventajoso;
  • (iv) promover iniciativas regionales que apoyen proyectos nacionales (locales) de certificación;
  • (v) utilizar la certificación como una garantía para acceder a préstamos; y
  • (vi) acceder a fondos que no están dedicados directamente a la certificación, pero que pueden apoyar a alguno de los procesos que llevan a ella, ya sea la capacitación o implantación de las normativas.

Las ONGs e instituciones académicas podrían:

  • (viii) administrar subsidios de fondos del gobierno y articular la demanda y oferta de servicios de capacitación, implantación de normas y certificación de turismo sustentable;
  • (ix) canalizar incentivos de crédito a organizaciones certificadas;
  • (x) identificar nuevos nichos de mercado y fuentes de financiamiento y divulgar información que contribuya a captarlos;
  • (xi) concienciar y capacitar a la oferta y demanda respecto a la implantación de normativas de turismo sustentable y su certificación;
  • (xii) propiciar la investigación científica en el tema;
  • (xiii) concienciar a potenciales inversionistas y asesorar en la elaboración de instrumentos de financiación; y
  • (xiv) difundir lecciones aprendidas y mejores prácticas.

Las compañías e instituciones certificadoras podrían:

  • (i) promover coordinación entre sistemas de certificación y colaborar con los tres tipos de instituciones listadas en los puntos anteriores para conseguir apoyo financiero, incentivos fiscales y cooperación técnica dirigida a la sostenibilidad turística; y
  • (ii) fijar precios acorde al tamaño de las empresas que implanten y se certifiquen productos y servicios en turismo sostenible.

La clave para lograr autosuficiencia de programas de certificación está en establecer una experiencia piloto de la cual se saquen lecciones y mejores prácticas a replicarse en otros programas de turismo sostenible. Los puntos presentados por las mesas de trabajo deben llevar a las instituciones de financiación a crear y disponer de una variedad de mecanismos de asistencia financiera y técnica en los proyectos a aprobarse.

Más aún, un proyecto con alcance regional puede hacer posible ampliar la recolección, el análisis y la difusión de datos referentes a la implantación y certificación de normas o prácticas óptimas de gestión de emprendimientos en turismo sostenible. La organización de redes regionales de sistemas de certificación, como la Red de Certificación en Turismo Sostenible de las Américas lanzada en esta Conferencia, contribuye al intercambio de experiencias y la formación de alianzas que facilitan el acceso a fondos multilaterales.

Es de destacar que las cuatro mesas de trabajo se orientaron a discutir aquello que las organizaciones de financiación deben tomar en cuenta cuando apoyan una iniciativa de turismo sostenible. Sin embargo, no se tomó en cuenta de que existen otras áreas que ya cuentan con financiamiento, como son los proyectos de carácter ambiental, social, de competitividad, de inversión extranjera directa, e iniciativas de integración (regional y hemisférica). En todas estas áreas, las empresas turísticas tienen el reto de cumplir normativas y adherirse a acuerdos internacionales. Esta confluencia debería aprovecharse como medio para acceder a financiar los procesos de certificación en turismo sostenible.

Finalmente, aunque las organizaciones de financiación están financiando gran parte de los distintos programas de certificación, especialmente en sus fases iniciales, la falta de coordinación entre las iniciativas ha resultado en una multiplicidad de proyectos con objetivos desencontrados y áreas de focalización sobrepuestas. Las organizaciones de financiación, especialmente las instituciones financieras de desarrollo oficiales, pueden directamente o a través de los gobiernos y/o ONGs ejecutoras, tomar un papel activo en la formación de estos programas de certificación y su sostenibilidad a largo plazo, en vistas a los beneficios públicos que los mismos tienen para la economía y la sociedad en su conjunto.

A empresas turísticas privadas y sus asociaciones gremiales:

Las empresas privadas son las principales participantes/grupo objetivo y beneficiarias de los programas de certificación, pero deberían tomar un papel más activo en la formación de estos programas desde el comienzo del proceso. Las asociaciones remiales de empresas turísticas tienen un papel esencial en la coordinación con otros sectores (público, académico, ONGs).

Se puede resumir las siguientes recomendaciones para empresas y sus asociaciones:

  • Es imprescindible que el sector privado se informe sobre los beneficios e implicaciones de la certificación. Por esto es necesario establecer una comunicación abierta y amplia con los otros grupos involucrados y crear confianza entre ellos.
  • El sector privado debe definir cuál es el papel que desea ocupar en procesos de certificación, y que apoyo o compromiso precisaría del gobierno u otros grupos involucrados. Para ello, es importante que las asociaciones privadas traten las cuestiones de certificación, o que formen una nueva entidad que represente al sector privado en temas de certificación, participando activamente en el proceso.
  • Las compañías deben considerar los sistemas de certificación no solamente por los potenciales beneficios en mercadeo sino, también como un marco o herramienta para desarrollar capacidades que mejoren el desempeño de sus operaciones en términos de sostenibilidad.
  • Hay varias acciones que el sector privado puede hacer para facilitar la participación de micro empresas y PYMES en certificación:
  • Formar «clusters», alianzas/grupos para un financiamiento grupal más favorable.
  • Coordinar con los otros grupos para crear agencias de apoyo para PYMEs.
  • Hacer que las Cámaras de Turismo participen en procesos de certificación, representando los intereses del sector privado.
  • Invitar a bancos al proceso, explicando las dificultades de las PYMEs en acceder a créditos, y estimulando para que creen soluciones financieras (paquetes de créditos especiales).
  • Grandes empresas pueden ayudar a las PYMEs:
    • con proyectos sociales,
    • efectos multiplicadores
    • apoyar PYMEs proveedores, o que forman parte del cluster local para certificarse (apoyar la certificación de destinos – cooperar con autoridades y asociaciones locales)
  • Es importante que las empresas participantes en programas de certificación adopten acciones de mercadeo para promover sus productos certificados:
  • Es importante que las compañías identifiquen el mercado para empresas certificadas. Hay una variedad de grupos de consumidores para empresas certificadas: turistas, autores de guías turísticas, periodistas, mayoristas (agencias y operadores), minoristas (agencias locales, proveedores de servicios), gobiernos y organizaciones (como compradores de servicios).
  • Segmentar las actividades de mercadeo según consumidores arriba mencionados.
  • Incluir en los materiales y comunicaciones de mercadeo información sobre su participación en certificación.
  • Explicar a los turistas las ventajas de productos certificados en términos muy sencillos y fáciles de entender.

A ONGs e instituciones académicas:

Las siguientes funciones y líneas de acción fueron identificadas para las organizaciones no-gubernamentales e institutos académicos para apoyar e incluso gestionar sistemas de certificación:

Investigación y divulgación de resultados, intercambio de experiencias entre países y dentro del propio país sobre:

  • La elaboración de planes y proyectos relacionados con el turismo sostenible y la certificación
  • Tecnología ambiental, técnicas de gestión sostenible
  • Monitoreo de la sostenibilidad en turismo
  • Buenas prácticas y estudios de caso
  • Materiales didácticos informativos
  • Estudios de mercado
  • Información sobre créditos, donaciones u otras fuentes de financiación
  • Criterios básicos e indicadores de certificación y revisión técnica de ellos
  • Función de redes profesionales

Capacitación y educación para empresas, funcionarios, la población en general y otros actores involucrados:

  • Proveer una visión integral
  • Fomentar la capacitación local
  • Fomentar la participación de los diversos niveles de colegiados
  • Intercambio de experiencias sobre programas de capacitación
  • Capacitación de recursos humanos para la gestión financiera
  • Educación ambiental de las comunidades rurales y locales
  • Implementación de programas y campañas de concientización a los consumidores
  • Gestión de procesos de certificación:
  • Papel de facilitador entre sector privado, público y financiero en procesos de certificación
  • Divulgación de agenda de certificación
  • Facilitación del proceso de planeamiento participativo
  • Apoyo financiero y mercadeo
  • Identificación de fuentes financieras
  • Asistencia técnica para empresas
  • Apoyo con trabajo voluntario y contribuciones en especie
  • Difusión de los resultados de la gestión y aplicación de los recursos dirigidos a certificación
  • Monitoreo de la aplicación del sistema de certificación
  • Promover más flexibilidad de los criterios de líneas de crédito
  • Establecimiento de centros de información local (Internet, base de datos, etc.)

A empresas e instituciones certificadoras:

  • Colaboración entre grupos de actores:
  • Establecer una buena comunicación hacia y entre entidades de gobierno y empresas privadas, brindándoles más información sobre condiciones, beneficios y resultados de certificación con el fin de involucrarlos, generar confianza, y asegurar la transparencia en el proceso.
  • Establecer una entidad o comité multi-actores, y procesos participativos desde el principio del desarrollo de programas de certificación.
  • Coordinar con entidades de normalización.*
  • Considerar objetivamente la participación dentro del sector privado, de todos los tamaños de empresas, incluyendo las empresas micro e informales.
  • Usar tecnologías modernas (como Internet) para divulgar información, y también métodos de comunicación convencionales para llegar a comunidades más remotas, con limitaciones de acceso a las telecomunicaciones.
  • Promover la inclusión de la certificación en políticas nacionales de turismo.
  • Establecer redes de programas de certificación
  • Enlaces con organismos internacionales.
  • Promover investigación sobre sostenibilidad turística en universidades.

Financiación de empresas para permitirles participar en programas de certificación:

  • Lograr colaboración del gobierno y crear un fondo para que las empresas puedan hacer los cambios necesarios para alcanzar los criterios de certificación y cubrir costos administrativos de la misma, considerando mecanismos fiscales y otros incentivos (por ejemplo: subsidios, garantía estatal para créditos).
  • Usar fondos multilaterales.
  • Invitar bancos al proceso, explicar dificultades de las empresas, y estimular para que creen soluciones financieras (por ejemplo paquetes de créditos especiales).
  • Establecer tarifas proporcionales a la escala de las empresas.

Financiación de programas de certificación:

  • Lograr la autosuficiencia de los programas de certificación es un verdadero reto. La clave es establecer una masa crítica de empresas certificadas y un mercado para ellas. Por esta razón, el financiamiento de un programa debe ser suficiente para todas las etapas de desarrollo, con el fin de lograr dicha masa crítica de empresas participantes. La organización de redes regionales de sistemas de certificación es importante para el intercambio de experiencias, y la formación de alianzas con fondos multilaterales.
  • Facilitación del acceso de empresas micro, pequeñas y medianas:
  • Crear condiciones equitativas para entrar en el programa de certificación.
  • Fomentar la formalización de empresas y vincular el proceso de certificación con el proceso de formalización.
  • Aprovechar las líneas de crédito existentes para promover la certificación de PYMEs y crear líneas de crédito especiales para ellas.
  • Influenciar al Estado para mejorar y adaptar sus mecanismos de incentivos existentes.
  • Planeamiento estratégico para reingeniería de las PYMEs.
  • Certificación en grupo de PYMEs.
  • Capacitación por etapas para compartir aprendizaje y capacitación en grupos.
  • Desarrollar guías y manuales adaptados al lenguaje de pequeñas empresas.
  • Involucrar universidades en capacitación.
  • Desarrollar guías o manuales de implementación.
  • Reconocer que las diferentes empresas pueden necesitar diferentes soluciones para el mismo tipo de problemas.
  • Adecuar las soluciones de acuerdo con las características especiales de cada empresa, y que no se limite solo a soluciones financieras, sino buscar soluciones integrales (considerar diferentes formas), particulares y creativas.
  • Ayudar a las pequeñas empresas a ponerse en contacto con los operadores de los países emisores, ya que muchos están buscando trabajar con pequeñas empresas.
  • Promover el turismo comunitario rural y las PYMEs involucradas con centros de información, y apoyos fiscales (e.g. líneas de crédito).
  • Desarrollo de criterios de certificación y aspectos operacionales de los sistemas de certificación:
  • Definir los criterios de certificación con la participación de representantes de todos los grupos de actores privados y públicos del turismo.
  • Aclarar los conceptos de sostenibilidad y otros conceptos básicos.
  • Definir claramente el objeto de la certificación (por ej. si es para emprendimientos o destinos).
  • Aplicación de indicadores que sirvan para la definición de la normativa de base en turismo sustentable.
  • Los criterios no deben cubrir solamente los aspectos ambientales sino también los socio-culturales, y la contribución de las operaciones turísticas a la reducción de la pobreza.
  • Hay que definir los criterios de manera de permitir un cumplimiento gradual de normas cada vez más elevadas. Al principio, las normas deberían exigir requisitos mínimos para facilitar el acceso a la certificación. Se podría poner, por ejemplo, el nivel de los criterios en un 10% por encima de las normas que exigen las leyes, para poner una base alcanzable al empezar. Luego se pueden ir subiendo los requisitos a niveles más altos, dando asesoramiento a las empresas para alcanzarlos. Este proceso implica la revisión de los criterios y niveles de cumplimiento de los mismos periódicamente (por ejemplo cada unos o dos años).
  • Para atraer al sector privado los sistemas de certificación no deben de ser demasiado complejos y caros (lo más simple y barato posible). La simplificación de procedimientos y disminución de costos son necesarias para no desestimular la certificación.
  • Evitar la confusión entre el certificado de sostenibilidad y la calificación de calidad de servicios. Presentar en paralelo (pero separados) medidores de certificación de sostenibilidad y categorización de calidad de servicios.
  • Establecer indicadores para medir los resultados (ambientales, sociales y económicos) de certificación, con el fin de evaluar la eficacia y eficiencia de los programas.
  • Mercadeo: proveer ventajas competitivas a las empresas e influir en los consumidores
  • Crear estrategias y sistemas coherentes de comunicación y mercadeo para que:
  • _ a) Las empresas se interesen y participen en programas de certificación,
  • _ b) Los consumidores utilicen empresas y productos certificados.
  • Establecer una marca comercial para el programa de certificación para lograr un reconocimiento en el mercado.
  • Lograr mayor aceptación del programa en el mercado a través de acreditación.
  • Incluir los aspectos ambientales, culturales y sociales evaluados en los materiales promocionales.
  • Considerar la demanda de servicios de certificación como indicador del valor de la certificaron en el mercado.
  • Cooperar entre programas de certificación para posicionarse en el mercado.
  • Administrar los programas de certificación con visión empresarial.
  • Aprovechar los medios de comunicación existentes y convencerles para que cubran temas de certificación de sostenibilidad.
  • Entender el mercado para empresas certificadas (grupos de consumidores objetivo): turistas, autores de guías turísticas, periodistas, mayoristas (agencias y operadores), minoristas (agencias locales, proveedores de servicios), gobiernos y organizaciones (como compradores de servicios).
  • Hacer estudios del mercado consumidor (motivaciones, decisiones de compra) y sobre productos certificados. Es también necesario incluir estos aspectos en los estudios generales de los mercados turísticos. Estudiar también a los consumidores domésticos en los países latino americanos también, y dirigir actividades de mercadeo para ellos.
  • Posicionamiento de programas de certificación y productos certificados en base a los estudios de mercado.
  • Segmentar actividades de mercadeo según los grupos de consumidores arriba mencionados.
  • Lograr que las oficinas públicas de turismo apoyen sistemas de certificación en sus actividades de mercadeo.
  • Llevar a cabo programas de concienciación para empresas y consumidores para crear una responsabilidad social e interés mayor.
  • Explicar a los consumidores/turistas las ventajas de los productos certificados en términos muy sencillos y fáciles de entender.
  • Involucrar a organizaciones que representan a los consumidores.
  • Formar grupos, clubes de usuarios de productos certificados, y promoverlos en diferentes formas (por ejemplo, en ferias).
  • Vincular ferias de turismo comerciales con eventos sobre certificación, aprovechando la presencia de empresas.
  • Intercambio de medios de comunicación a nivel regional, internacional (por ejemplo, feria de turismo especializado para prensa), educar a la prensa sobre sostenibilidad.

Red de certificación en turismo sostenible de las Américas

Esta red representa uno de los componentes de un esfuerzo internacional conjunto que está siendo liderado por Rainforest Alliance, la Organización Mundial del Turismo, la Sociedad Internacional del Ecoturismo, y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente con el fin de promover la incorporación de principios de sostenibilidad en el desarrollo de políticas de turismo y en altos estándares ambientales y sociales para el turismo.

El crecimiento del turismo de naturaleza ha generado el desarrollo de un número creciente de programas de certificación independientes, los cuales realizan sus propios esfuerzos por controlar el desarrollo desmedido y por fomentar responsabilidad entre establecimientos llamados «eco». La red creada tiene la intención de motivar el diálogo entre estos participantes y servir como centro regional de información y asistencia técnica.

Los participantes en el lanzamiento de la red definieron su misión de la siguiente forma: «Promover el turismo sostenible en la región, a través del fortalecimiento de las iniciativas de certificación, con base en el respeto y reconocimiento mutuos, el esfuerzo conjunto, la armonización de sistemas y compartiendo información y experiencias.» Los objetivos de la red incluyen: el desarrollo de herramientas de trabajo comunes y una estrategia de mercadeo conjunta entre los miembros de la red; la generación de recomendaciones sobre «mejores prácticas de manejo» para turismo sostenible con base en estándares aceptados ya existentes a nivel regional y nacional; y la definición de estrategias para promover la participación de operaciones turísticas, principalmente de pequeña escala, en la implementación de mejores prácticas y en procesos de certificación.

La red nace del estudio de factibilidad para la creación de un Sustainable Tourism Stewardship Council (STSC), el cual fue coordinado por Rainforest Alliance y cuyas conclusiones fueron presentadas a principios del 2003 (ver http://www.rainforestalliance.org/programs/sv/stsc.html). Este proceso de consulta que duró 18 meses concluyó sobre la necesidad de crear plataformas regionales para diseminar información acerca de certificación y para discutir aspectos claves como la participación de pequeña y medianas y operaciones comunitarias en certificación, sostenibilidad financiera, mercadeo, monitoreo y evaluación, y acreditación.

Rainforest Alliance Costa Rica servirá como secretaría inicial para esta red. A través de enlaces nacionales, la red promoverá la participación de representantes de una variedad de partes interesadas y da la bienvenida a todas aquellas iniciativas que están administrando programas de certificación en la región.

Representantes de las siguientes organizaciones e instituciones participaron y apoyaron el lanzamiento de la red:

  • Asociación Alianza Verde, Guatemala.
  • Programa Green Deal, Guatemala.
  • Asociación Ecuatoriana de Ecoturismo (ASEC), Ecuador.
  • Conservación & Desarrollo, SmartVoyager, Ecuador.
  • Caribbean Alliance for Sustainable Tourism (CAST), Puerto Rico.
  • Universidad San Ignacio de Loyola para la Certificación Turística en el Perú (CSTP), Perú.
  • Conservation International (CI).
  • EkoSupport, Chile.
  • Expoecoturismo, Venezuela.
  • Instituto Costarricense de Turismo, Certificado para la Sostenibilidad Turística (CST), Costa Rica.
  • Instituto de Hospitalidade (IH), Programa de Certifica\’e7\’e3o em Turismo Sustentável (PCTS), Brasil.
  • Instituto Nacional de Ecología (INE), México.
  • International Indian Treaty Council and Indigenous Tourism Rights International.
  • Kiskeya Alternativa Certificación Program (Fundación Taiguey), República Dominicana.
  • Organización Mundial del Turismo, Sección de Desarrollo Sostenible del Turismo.
  • Plan 21, Argentina.
  • Programme for Belize, Belice.
  • Programa Ambiental Regional para Centroamérica (PROARCA/APM).
  • Rainforest Alliance.
  • Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), México.
  • Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM).
  • Sustainable Travel International (STI), USA.
  • The International Ecotourism Society (TIES).
  • Turismo & Conservación Consultores, Costa Rica.
  • WWF-Brasil y SOS Mata Atlantica en representación del Conselho Brasileiro de Turismo Sustentável (CBTS), Brasil.

SDT – Sustainable Development of Tourism

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